Han pasado ya unos días y todavía siento una enorme tristeza cuando me acuerdo de tí; Pedro, compañero, nos dejaste repentinamente por una enfermedad que te atacó por la espalda, cobardemente, sin que te diese la oportunidad de poder luchar cara a cara, pero aunque ya no estés con nosotros, ni te olvidamos, ni dejaremos que tu presencia en este mundo haya sido en vano.
Te dedico estas palabras, con todo mi cariño:
"Dios, algo nuestro se ha llevado,
nos ha arrebatado un ser querido,
un compañero y amigo, se ha marchado.
Se que estás lejos, que te has ido,
se que no te veré ya a mi lado,
se que ni siquiera me he despedido,
pues la muerte, tan pronto te ha llamado,
que no me acostumbro a saber que te he perdido.
Dios, algo nuestro se ha llevado.
Te siento cerca, aunque te hayas ido,
te siento respirar, aunque no hayas respirado,
te siento latir, aunque tu enfermedad te haya vendido,
te siento hablar, aunque tu boca hayas sellado;
te siento tan vivo, que se que no te has ido.
Dios, algo nuestro se ha llevado.
Pero hay algo que llevarse no ha podido,
la amistad y el cariño que hemos guardado,
porque amigo del alma, en el corazón te llevamos."
Estas, son sólo unas palabras que algún día podremos decirte al oído, te queremos!
Hasta pronto =)
Marcadores