Malos días y desaires tenemos todos. El chofer no es ocasional y pasan largos ratos juntos. Seguramente, en más de una ocasión se habrán reído de alguna anécdota o chistes, comentarios etc. Yo he tenido jefes que cara al público se mostraban como auténticos ogros, (a eso le llamaban trazar estatus de liderazgo), luego, sentado con él, compartiendo mesas o cañas, la cosa variaba en extremo y se mostraba amigable y cercano.
Lo que dentro del coche haya sucedido, dentro del coche se arreglará. No es normal que un enfado o mal gesto trascienda como noticia de prensa. Aun menos normal es que el redactor del artículo plasme sus impresiones en los comentarios y argumentos que hace, como reconduciendo la opinión del lector.
Sea el rey, Coronel, alcalde, etc, se crea una relación especial y próxima entre ambos. Mi experiencia con cierto concejal de cultura me dice que todo ha de quedar en casa. Le he oído hacer chistes sobre su propia alcaldesa (mismo partido). Otras veces, hacer comentarios que te hacen preguntarse si se trata de la misma persona, pero todo queda ahí, en la intimidad del servicio. Estoy convencido que si cabe la disculpa, ésta no se hará esperar. Además pienso que este tema entra más en el terreno de prensa rosa, buscando donde no hay.
rajoy dimisión, please :manifa:
Marcadores