Muchos españoles tendrían que dejar de serlo, para qué se realice una traición separatista regional; aunque parece ser que, aparte de los lobotizados habituales, la desidia, cobardía, y egocentrismo habitual comienza a hacer efecto.

Hay una poesía del señor Hernandez ( D. Miguel) que se titula “Vientos del Pueblo” en la que habla de bueyes que mansamente humillan y toros con el orgullo en el asta. Lástima que los “vientos” de antaño hayan sido sustituidos con el decadente y artificial “aire acondicionado”.