¡Qué lección ni qué leches!
En primer lugar el tío ese es un fascistoide de los de bigote, un retrogrado integral, y seguramente aficionado a los toros. En segundo lugar , en una sociedad del primer mundo y democratadetodalavida, eso no se podría hacer sin el consentimiento del Sindicato de Estudiantes Repetidores. En tercer lugar, el ejemplo interpuesto para comernos el tarro vilmente, nunca podría darse ya que profesores de esa calaña nunca estarían en primera línea de fuego; seguramente su lugar estaría ocupado por algún “interino” salido de las listas de CCOO, que ya estaría aleccionado para “coleguear” adecuadamente con los susodichos alumnos. En cuarto lugar , tampoco sería real el ejemplo, ya que Juan, atendiendo a la flexibilidad exigible en los horarios educativos, a esas horas todavía estaría metiéndose un “peta” con la Trini en el chiringuito de la facultad. Tampoco es cierto que el fachorri ese de profe pueda preguntar nada, ya que está comprobado por la asociación de Sicólogos para la Democracia, que el paso de cualquier actividad a otra distinta que lleve implícito una determinada atención ,y dentro de una colectividad humana, lleva implícito un determinado periodo de adaptación; por lo tanto y consecuentemente, los alumnos estarían “acomodando sus neuronas” a la nueva situación a base de charletas, risas, y lecturas de mensajes de su móvil ; y no se habrían enterado de nada.
Así qué de películas de arte y ensayo nada.

PD. Se advierte al personal que la ironía escrita puede herir la susceptibilidad de algunos lectores.

:salu: