El juez imputa a un guardia civil por el homicidio de un magrebí en el Grao




Un guardia civil de la Policía Judicial de Benicàssim ha sido imputado por el juez del juzgado de Instrucción número 6 de Castellón como presunto autor del homicidio de un magrebí, de 45 años, que apareció abatido a tiros frente a una casa de citas del Camí la Plana del Grao, en abril del 2011, según confirmaron a Mediterráneo fuentes judiciales.




El agente se encuentra en estos momentos en libertad provisional a la espera de juicio mientras se instruyen las diligencias del sumario en una causa, que, como detallaron estas fuentes, está abierta por homicidio, tráfico de drogas y por otro delito relativo de la prostitución. Por estos dos últimos hechos, el guardia civil estaría también implicado como supuesto autor, tal y como especificaron las mismas fuentes.

El tiroteo se produjo el 21 de abril del 2011, sobre las dos de la madrugada, en la puerta de un burdel ubicado en el Camí la Plana, número 141. Un gran charco de sangre envolvía el cadáver de un hombre, tendido boca abajo. Los vecinos de la zona explicaron en su día a este periódico que escucharon disparos y, poco después, a varios vehículos del Cuerpo Nacional de Policía. Los agentes taparon el cadáver con un plástico, mientras llegaba el forense. El especialista en medicina legal advirtió de que el fallecido había recibido varios disparos de arma, todos ellos mortales de necesidad al impactar las balas en diversos órganos vitales.

La Policía Nacional permaneció durante horas interrogando a los posibles testigos del suceso y acordonó la zona para facilitar la búsqueda de pruebas por parte del equipo de Policía Científica. Los investigadores analizaron las huellas dactilares de la entrada a la casa de citas, así como también las marcas de un vehículo con el que, al parecer, habría huido el autor tras perpetrar los disparos.

En la escena del crimen no hallaron el arma. Además, efectuaron una búsqueda exhaustiva, tanto en las acequias como en contenedores de basura.

El prostíbulo en cuestión, además, contaba con cámaras de videovigilancia en los accesos, por lo que el Cuerpo Nacional de Policía estuvo analizando las mismas en la comisaría, donde descubrieron nuevos detalles del suceso.

DETENCIÓN // Tras ocho meses de investigación, la Policía Nacional, en diciembre del 2011, detuvo al agente de la Guardia Civil. En un principio trascendió que había más personas implicadas en los hechos. Un extremo que no ha sido confirmado por la autoridad judicial, que continúa con las pesquisas para esclarecer lo ocurrido.

El guardia civil, en calidad de imputado, se presenta periódicamente en el juzgado, como confirmó el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. H

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