Estoy segura que ese guardia a estas alturas debe estar hecho leña y más que arrepentido de ese comportamiento.
Y doy gracias al cielo porque esos abuelillos que pueden ser los de cualquiera, no se hayan caído al suelo y la virgen del Pilar haya hecho todo lo leve posible ese empujón, o que quizá dicho empujón no llevase la fuerza suficiente para hacer daño. Pero claro, con un tiarraco de esa envergadura... hasta un soplo suyo habría tambaleado a cualquiera, fijo.
Seguro que no se volverá a repetir por parte de dicho trabajador. Los trabajadores en cualquier ámbito laboral nos equivocamos.
Claro, si yo me equivoco no me sacan en la sexta ni en intereconomía.
Estoy segura que ese ejemplar de la naturaleza con ese arranque, llegado el momento, habría dado la vida por esos abuelos. ¿O es que todavía no conocemos como se las gasta la GUARDIA CIVIL?
Lo digo porque a mí, dada mi naturaleza intrépida, a veces temeraria, o (culo inquieto) en mi juventud, como prefiráis [ ... ] de alguna me han sacado.
Beberíamos de estar a las duras y a las maduras sobre todo cuando se la juegan muchas veces con helicópteros, en la montaña, en el mar, etc por todos nosotr@s.
Viva la Guardia Civil, y ese guardia a meditar, en la acción, reacción, repercusión de los hechos. La juventud es temeraria, pero no seré yo quien lo lapide.
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