Por desgracia hay muchos más: emboquetados, especialistas que nunca están disponibles, oficiales que ni están ni se les espera, agregados, mandos de puesto que parece que le tienen alergia al trabajo, etc.
Demasiada gente, viviendo demasiado bien, como para mover un dedo para que esto cambie y se modernice.
De pena 500.000 euros tirados a la basura, que bien podrían ser material y equipación para el que se juega el cuello en la calle, pero queda más cuki la mierda esa en prensa.
Cuando piensas que no puede ir a peor siempre encuentran algo nuevo y sorprendente.
Marcadores