No solo eso.............

dejo esta noticia, es para vomitar.

http://www.abc.es/20120424/espana/ab...204231819.html

La lista de las «otras víctimas del conflicto», la que la «izquierda abertzale» ha plasmado en su «euskalmemoria», incluye a miembros de ETA y de Batasuna asesinados por los GAL, y que ya fueron reconocidos como víctimas por el Estado, con el correspondiente derecho a las indemnizaciones que establece la Ley, y que cobraron.

En la presentación, este fin de semana, de la Fundación «Egiari Zor», impulsada por los batasunos, participaron, entre otros, Carmen Galdeano, hija del directivo del periódico «Egin», Xabier Galdeano Arana, asesinado a tiros el 30 de marzo de 1985 en Bayona, por mercenarios de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL). Carmen Galdeano, también abogada de presos de ETA, reivindica para su padre que sea reconocido como «víctima», algo que ya hizo hace tiempo el Estado, ese mismo que la «izquierda abertzale» llama «represor». Lo cierto es que todas las personas asesinadas por los GAL están consideradas como víctimas del terrorismo.

El caso de Argi Perurena
Un reconocimiento del que incluso se ha beneficiado la hasta hace poco interlocutora de los etarras encarcelados en Francia, Argi Perurena. ¿Por qué? Pues por su condición de hija de Vicente Perurena, simpatizante de la banda, asesinado también a tiros por los GAL, el 8 de febrero de 1984 en Hendaya. A Vicente Perurena también lo coloca la «izquierda abertzale» entre las «otras víctimas del conflicto», pese a estar acogida a la Ley aprobada en su día por el Congreso.

Como en su día ya informó ABC, en la citada «euskalmemoria Batasuna incluye además etarras que murieron al estallarles la bomba con la que pretendían una matanza, terroristas que se suicidaron, o manifestantes proetarras con hematomas ocasionados en el transcurso de alguna algarada.


Y otra............

Batasuna, que en la elaboración de la «euskal memoria» considera «víctimas de la política penitenciaria» a aquellos familiares de presos que han sufrido un accidente de tráfico cuando se trasladaban a la cárcel, excluye sin embargo a dos trabajadores afines al nacionalismo que fallecieron al colisionar contra una barricada colocada por las Gestoras pro Amnistía.

Ocurrió a primeras horas de la noche del 28 de noviembre de 1988. Había sido una jornada de movilizaciones convocada por las citadas Gestoras pro Amnistía a favor de los presos de ETA y de los «refugiados». Los cortes de carretera fueron múltiples a lo largo de toda la geografía vasca. Jesús María Nazábal Garmendia e Isidro Echániz Aramburu se desplazaban en una furgoneta por una carretera próxima a la localidad guipuzcoana de Ataun. Al salir de una curva, el vehículo colisionó con un árbol que los proetarras habían cruzado en la carretera. Nazábal falleció prácticamente en el acto, mientras que Echániz, gravemente herido, murió días después en el hospital.

La "euskal memoria" de Batasuna no les incluye en esa perversa lista de las «otras víctimas del conflicto», pese a que ambos trabajadores eran de un entorno nacionalista y la muerte les sobrevino en el contexto de una «jornada de lucha». Sí incluye a los familiares de presos etarras que han sufrido algún accidente cuando se dirigían a la cárcel o regresaban de la visita; también considera «víctimas del conflicto» a simpatizantes de la «izquierda abertzale» que sufrieron un infarto, una lesión en el codo o una contusión en la espalda cuando, por ejemplo, participaban en una manifestación