Cita Iniciado por Citoyen Ver mensaje
La medida más corriente de hacer fraude con monedas antiguamente consistía en recortarlas, haciéndolas un poco más pequeñas, para quedarse con el valioso metal de oro o plata.


Por tal motivo se ideo por algunas casas de monedas el acuñarlas con unos cordoncillos en su borde para indicar su tamaño real y evitar semejante práctica. Ese cordoncillo se tornó con el tiempo en las rayitas o dentaduras de los bordes que tanto han pasado por nuestros dedos con la desaparecida moneda española.