Un capitán de Tráfico de la Guardia Civil sufre un accidente a 180 por hora en la M-40.
Un capitán de Tráfico de la Guardia Civil sufre un accidente a 180 por hora en la M-40 - ABC.es
El vehículo oficial del mando iba conducido por otro guardia y se vio implicado en una triple colisión en por el carril izquierdo de la autovía, a la altura de El Pardo. Hubo tres heridos leves
El capitán del Subsector Norte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Madrid, Carlos Gascón, sufrió un accidente a última hora de la tarde de ayer en la M-40. Fuentes de la investigación indicaron a ABC que el coche en el que viajaba el mando del Instituto Armado circulaba a 180 kilómetros por hora en el carril izquierdo del cuarto cinturón madrileño, según los primeros datos.
El siniestro se produjo a las 19.43 horas, a la altura del punto kilométrico 51,200, cerca de El Pardo. El capitán Gascón viajaba en un Alfa Romeo oficial del Cuerpo, conducido por otro miembro de la Benemérita. En el accidente colisionaron hasta tres vehículos. Se investiga si el alcance se produjo durante una maniobra de adelantamiento de alguno de los implicados.
Uno de los otros turismos, un Audi A-6, lo guiaba una mujer, a la que en ese momento acompañaban su marido y dos hijos pequeños, que resultaron ilesos. Eso sí, el Samur-Protección Civil realizó algunas atenciones a tres personas, todas por abrasiones y dadas de alta en el lugar.
Polémica por las multas
El Subsector de Tráfico que dirige el capitán accidentado ayer ha sido objeto de polémicas en varias ocasiones. El pasado enero, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), la mayoritaria en el sector, denunció que exigía a los agentes a su cargo «poner 50 multas como mínimo para cobrar a final de mes la productividad».
«La aplicación del Resumen de Actividad Individual (RAI) ha convertido a los guardias civiles de estos destacamentos en cajas registradoras de las arcas del Gobierno —señaló entonces la AUGC en un comunicado—, que en su afán recaudatorio ha optado por castigar a los guardias civiles que no participan de esta avidez, y se olvida de los fines por los que se creó esta especialidad: primar la vigilancia y control del tráfico, los servicios humanitarios y otros servicios de vital importancia».
La AUGC apuntó que, sin el complemento de productividad, los agentes de Tráfico ven mermado su suelo en más de 200 euros al mes.
La Dirección General del Cuerpo negó que se retirara ese pluspor no poner muchas multas y que se evaluaba por parámetros distintos.
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