Me gustaría comentar la experiencia que tuve con el pelotas de mí puesto. Un buen día tenemos que desplazarnos a la Cía. para llevar documentación, momento idóneo que aprovechó este personaje para regalar el oído al Subteniente de la Plana. Una vez que tenía hecha la cama (cafelito incluido), suelta la caña y le dice al Subteniente: "... oiga mí Subteniente haber si me busca una mesa para mí en la oficina; respondiendo éste: " ni tu llegaras tan alto, ni yo tan bajo". Que cara se le quedo!!, más gente lo escucho todo, pidiéndome que nos marchásemos rápidamente.