La sra. Merkel podrá dormir como le plazca, que para eso dirige un país totalmente industrializado y puntero en casi todos los aspectos.
Me hace mucha gracia cuando alguien intenta comparar las economías de España y Alemania. Eso es como pretender comparar un pepino con una bici de montaña. Aunque sí deberíamos fijarnos más en cómo lo hacen ellos; me refiero a su conciencia social aplicada en todos los órdenes de la vida, y sobre todo, en lo laboral y en lo personal. Allí no se vitorea a nadie que engañe al fisco, a nadie que engañe al Estado. Allí son más serios en los aspectos que afectan a la comunidad, al Estado.
Nosotros somos muy diferentes y nuestra conciencia social suele estar adormilada o echando la siesta, que al fin y a la postre viene a ser lo mismo.