Cita Iniciado por berlin Ver mensaje
De un libro "LA REALIDAD DE LOS ENFRENTAMIENTOS ARMADOS", esta escrito por un policia español y aconsejo su lectura;

¿Por qué hasta los miembros especializados en asalto fallan o tardan más de lo esperado en reaccionar? Fernando Pérez Pacho es tajante: “Todos los entrevistados reconocieron que dispararon como pudieron. Todos tenían dudas, pensaban que era una situación irreal y que la preparación que tenían no era la adecuada”.

En los momentos de peligro, el ritmo cardiaco puede subir de 70 pulsaciones por minuto a 220 en apenas medio segundo. La adrenalina se dispara y el pensamiento común es el de sálvese quien pueda. Pero el policía ha de enfrentarse al peligro, ha de luchar contra la naturaleza que nos prepara para huir. Y, sobre todo, ha de luchar contra los cambios que sufre el cuerpo. Al llegar a las 115 pulsaciones por minuto se pierden “las habilidades motoras finas”, la coordinación ojos-manos, que se traduce en dificultad para realizar tareas múltiples como llamar por radio a la vez que se saca el arma. A las 145 pulsaciones se pierden las habilidades motoras complejas: ya no se puede marcar un teléfono o recordar un número, se tienen dificultades para enfocar y se pierde audición. Con 175, las pupilas se dilatan y se produce el “efecto túnel”, sólo se ve lo que está delante, “y si hay un agresor en tu lateral no lo detectas porque tu campo visual se reduce hasta un 70%”, añade Pérez Pacho. Al superar las 185 se llegan a realizar comportamientos irracionales, acciones inefectivas “como salir de detrás de un coche y perder protección o quedarse paralizado”.

Marcos, por ejemplo, reconoce que, al verse amenazado por un esquizofrénico armado con un cuchillo, no se le pasó por la cabeza sacar su arma. “Tan sólo cuando vi que lo hacía mi compañero lo imité”. “En la academia, por ejemplo, nos dijeron que no lleváramos el arma cargada en la recámara porque en el momento de usarla, el simple hecho de realizar esa acción disuade al agresor. Pero monté el cartucho y no se asustó. Si ni yo lo oí”.

http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/06/27/actualidad/1403887325_579764.html aconsejo leer todo el articulo....
Me quito el sombrero ante esas líneas.
Muy típico lo de montar el arma y con el ruido disuadir al esquizofrénico/atracador de banco. Por favor SILENCIO!! a ver todas esas personas gritando despavoridas viendo a este esquizofrénico correteando por la calles del pueblo con un cuchillo en la mano.. callénse por favor, que si no el esquizofrénico no me va a oir montar la pistolita y así disuadirse.
Soy de los que piensa que un Policía debe llevar su arma en condiciones de disparar. En condiciones de disparar significa sacar de la funda y apretar el disparador. La pistola trae todo tipo de seguros y la presión que hay que ejercer sobre el disparador con el arma en doble acción todos sabemos que es imposible que no sea consciente. Pero como decís, hay quién te trata como un inconsciente... dices bala en recámara y se ponen hasta blancos.
Hay quien considera que es mejor que, llegado la situación de estrés, ésta le permita:
a) Tener las dos manos libres. De lo contrario no podrás montar el arma (Berlín a puesto el ejemplo)
b) Montar el arma sin accionar el seguro... porque si con la Beretta con estrés accionas el seguro al tirar de la corredera corres el riesgo de que el gatillo esté blandito blandito... por lo que instintivamente vuelves a montar el arma, sale un cartucho por el lateral y vuelves a accionar el disparador y ves que sigue sin producirse el disparo, y vuelves a montar... hay casos de haber vaciado el cargador entero por la situación de estrés y no darse cuenta de que había accionado el seguro.
c) No pegarse un tiro en el pie al montar el arma, porque instintivamente te agachas para reducir silueta y con el estrés al montar el arma y ya estar pensando en el disparo metes el dedo en el disparador y PUM disparo en el pie. Hay varios casos de estos también.

A esto hay que añadir que se tarda más en hacer todos esos movimientos.

Yo por mi parte lo tengo claro, si quiero disparar saco el arma y encañono. Si no, el arma metida en la funda hasta el final del servicio. No veo el riesgo.
Pero cada uno es un profesional y puede tener su opinión, tan válida como la de cualquier otro. Claro que las explicaciones "oficiales" que nos han dado no se corresponden con las que salen en los manuales de uso de las armas ni en los cursos que puedas hacer por tu cuenta. De lo que creo que se trata de un problema de mieditis que viene desde arriba.