Acojonante el cinismo del personal, que acusa a un inválido de clase trabajadora por pagar a alguien a quien NECESITA (con mayúsculas), como sus pequeños recursos se lo permitían, mientras no dicen nada de la defenestración de la Ley de Dependencia que ha llevado a cabo el gobierno y que ha dejado a todas estas personas a su suerte. Estas son las leyes y las políticas que a algunos les gustan, las que abandonan a los pobres, las que no gravan a las grandes fortunas ni se preocupan de meter en la cárcel a los grandes defraudadores, ni de perseguir el fraude fiscal de las grandes comparaciones (33 de las 35 empresas del IBEX tienen oficinas en paraísos fiscales)